viernes, 15 de abril de 2011

Semana Santa

Queridos lectores, se acerca la semana mayor ó semana santa, pero realmente estamos convencidos de ésta historia, o solo lo hacemos por tradición, imaginas a Jesús, dando su vida por nosotros, como lo dicen las sagradas escrituras. Te voy a contar una anécdota y mi punto de vista al respecto, vaya que creo, estoy convencida de ese gran maestro, de esa hermosa y triste parte de la historia.


Yo como paciente bipolar que te recuerdo soy, en una etapa de una de mis crisis, no soportaba ver el Cristo clavado en la cruz, me dolía, era tal mi sensibilidad que mi padre por no verme llorar y sufrir empezamos a desclavar todos los Cristos que había en mi casa, hasta no dejar ninguno, en efecto no me gusta adorar una imagen y mucho menos de dolor, porque dios es amor, ya lo dice la biblia, "Yo soy el camino, la verdad y la vida", creo que ciertos intereses religiosos y económicos manipulan a la sociedad a través de diferentes imágenes, que le fe se mal entiende desde mi punto de vista.

Mi padre me enseño una filosofía, el camino más cercano a Dios es hacer el bien a los demás, ya lo dice el primer mandamiento "Amarás a Dios sobre todas las cosas y a tu prójimo como a ti mismo", si realmente viviéramos las leyes de Jesús, no habría guerras, envidias, discordia, divorcios, infidelidad , en fin todo sería diferente pero como seres humanos que somos nos gusta probar lo prohibido, desde la creación del mismo hombre y de la mujer, historias solo historias, la verdad es que la gente muere de hambre en muchos lugares del mundo, todos vemos nuestros intereses personales, la riqueza está repartida en ciertas áreas, como decir entonces que nos estamos preparando para la resurrección de Cristo en nuestro corazón, si en mi humilde opinión, ni siquiera respetamos los estatutos ó como yo le llamo los Principios Universales de la Vida, se me hace un tanto absurdo, en fin que Dios resucite en tu corazón, si verdaderamente lo sientes, yo en particular lo puedo sentir cerca de mí, en cada paso que he dado en mi vida, en mi padecimiento, en el amor de mi hijo, en la fortaleza cuando estoy pasando momentos difíciles y cuando lo he perdido ha sido porque yo me he soltado de su mano, el siempre está conmigo.

Felices días de reflexión y de paz interior

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